El medio de la formación y las competencias
La adaptabilidad es la capacidad de ajustar el propio comportamiento, los métodos o la postura ante el cambio, las limitaciones imprevistas o un nuevo entorno. Implica flexibilidad mental, apertura al cambio, tolerancia a la incertidumbre y voluntad de aprender continuamente. Una persona adaptable no sufre el cambio: lo anticipa, lo acoge y lo transforma en una oportunidad.
La asertividad se refiere a la capacidad de expresarse y defender los propios derechos, opiniones o necesidades de forma clara, directa y respetuosa, sin atacar a los demás ni mostrarse sumiso. Se basa en la confianza en uno mismo y en el reconocimiento de los derechos de los demás.
La autonomía es la capacidad de actuar de forma responsable y eficaz sin supervisión constante, tomando decisiones coherentes con el propio papel, los objetivos y las normas del equipo. Implica organización personal, control de su área de responsabilidad y sentido de la iniciativa.
La colaboración es la capacidad de trabajar eficazmente con los demás, compartiendo información, ideas y responsabilidades para alcanzar un objetivo común.
Se basa en la confianza, la comunicación y la cooperación, y va más allá del simple reparto de tareas: se trata de construir juntos.
La comunicación interpersonal es el conjunto de habilidades necesarias para comunicarse eficazmente con los demás, adaptándose al contexto, a las personas implicadas y a los objetivos. Incluye la escucha activa, la expresión clara, la reformulación, la comunicación no verbal, la empatía y, a veces, la asertividad.