Ya se trate de IA jurídica o de IA aplicada al derecho, el uso de la IA generativa se perfila ahora como un reto estratégico para los juristas de empresa y los directivos de pymes, que se enfrentan a la necesidad de adoptarla sin perder el control de los riesgos. Pero, en la práctica, ¿cómo se debe proceder? Descubra una metodología de implementación segura en 5 pasos, casos de uso y soluciones concretas para convertir la IA en un aliado de su práctica jurídica. Panorama general con Olivia Papini, experta en tecnologías emergentes aplicadas al sector jurídico.

La inteligencia artificial está transformando profundamente las profesiones jurídicas. Desde el auge de la IA generativa a finales de 2022, es necesario adaptar rápidamente las prácticas profesionales. El informe del Senado «La inteligencia artificial generativa y las profesiones jurídicas: actuar en lugar de sufrir» (diciembre de 2024) lo confirma: estas tecnologías constituyen a la vez una oportunidad considerable y un reto importante. Como demostró la fuerte reacción de la profesión de abogado ante la comercialización de la aplicación «I.Avocat» en enero de 2024, el desarrollo y el uso de tecnologías de inteligencia artificial denominadas «generativas» son a veces percibidos como una amenaza por algunos representantes de las profesiones jurídicas. Es necesario adoptar un enfoque pragmático: hay que desmitificar la IA sin idealizarla.
A continuación le indicamos cómo estructurar sus acciones en torno a tres cuestiones fundamentales: la ética y la responsabilidad, la automatización de tareas y la protección de sus datos jurídicos.
Léxico rápido
Ley de IA
El reglamento europeo sobre inteligencia artificial, que entró en vigor en 2024, establece obligaciones de transparencia, seguridad y conformidad en función del nivel de riesgo de los sistemas de IA. Regula estrictamente los sistemas utilizados en ámbitos sensibles como la justicia o los recursos humanos.
RGPD: Reglamento General de Protección de Datos
Es el reglamento europeo que regula la protección de datos personales. Impone transparencia, consentimiento y seguridad en todos los tratamientos de datos, incluidos los realizados mediante inteligencia artificial.
Privacidad desde el diseño
Es el principio según el cual la protección de los datos personales debe integrarse desde el momento del diseño de una herramienta, un servicio o un tratamiento de datos. Esto implica minimizar los datos recopilados, proteger los sistemas desde el principio y garantizar el cumplimiento del RGPD por defecto.
Derecho indicativo
Se trata de normas que orientan los comportamientos (cartas éticas, recomendaciones profesionales, códigos de conducta), pero sin fuerza jurídica vinculante. Este derecho «flexible» o «blando» complementa los textos legislativos (hard law) al precisar las buenas prácticas.
IA jurídica: ¿qué impacto tiene en la ética y la responsabilidad?
El uso de la inteligencia artificial generativa por parte de los juristas implica una redefinición de su función.
Aclarar la cadena de responsabilidad
Cuando la IA genera asesoramiento jurídico o analiza sus contratos, ¿quién es responsable en caso de error? Esta cuestión cobra una importancia crucial en su práctica diaria.
El informe del Senado destaca el riesgo: «La inteligencia artificial generativa se basa en un modelo probabilístico. Domina el lenguaje para producir contenido, pero no lo comprende. Por lo tanto, su fiabilidad no está garantizada».»
Por lo tanto, debe establecer una cadena de responsabilidad clara entre:
- el diseñador de la IA (transparencia sobre los límites)
- usted, profesional jurídico (verificación de los resultados)
- su cliente (información sobre el uso de herramientas de IA)
Testimonio
Tiffany Dumas, abogada especializada en protección de datos personales, socia de In Extenso Avocats PACA.
«En mi práctica, he aprendido a establecer sistemáticamente una cadena de responsabilidad clara con mis clientes cuando utilizo la IA para análisis del RGPD. Les explico que la IA me permite ahorrar tiempo en la detección de cláusulas problemáticas, pero que soy yo quien valida jurídicamente cada recomendación. Esta transparencia refuerza la confianza y delimita las responsabilidades».»
Convertirse en supervisor de IA: su nueva función
La IA no te sustituye, sino que redefine tu función. Te conviertes en garante ético, con nuevas competencias que desarrollar:
- evaluación crítica resultados generados (formación sobre sesgos algorítmicos)
- contextualización recomendaciones automatizadas (adaptación sectorial)
- detección de sesgos algorítmicos (desarrollo de una tabla de análisis crítico)
Si bien la aparición de la IA generativa ha suscitado temores de desaparición o reducción de la plantilla de profesionales del derecho (en particular, abogados), el informe del Senado aporta matices. De hecho, dado que la IA generativa es fuente de errores, la experiencia de un profesional del derecho seguirá siendo indispensable.
Utilizada con discernimiento en un marco ético y seguro, la IA puede contribuir a que el derecho sea más accesible, eficaz y equitativo.
Por ejemplo:
Un bufete de abogados ha implantado un protocolo de doble validación. Cada análisis contractual generado por IA es revisado críticamente por un abogado sénior y, a continuación, validado definitivamente por un socio o el director jurídico, que comprueba la pertinencia jurídica y contextualiza las recomendaciones en función del sector de actividad del cliente.
[Leer también]
¿Cuál es el impacto real de la inteligencia artificial en las profesiones? ¿Qué nuevos roles y competencias surgen de esta revolución?
Descúbralo en el libro blanco de ORSYS. Las nuevas profesiones de la IA - El impacto de la IA en las profesiones.
IA jurídica y automatización de tareas: aumento de la eficiencia y conservación de las competencias
Ganancias medibles en eficiencia
La IA generativa también permite realizar búsquedas jurídicas o redactar documentos estandarizados con mayor rapidez. Automatiza eficazmente muchas de sus tareas diarias.
- Investigación jurídica : reducciones significativas en el tiempo de búsqueda, según estudios del sector.
- Herramientas específicas : Doctrine.fr con IA, LexisNexis+, Dalloz IA, Claude/ChatGPT con metodología de verificación sistemática.
- Análisis contractual : mejora notable en la detección de cláusulas de riesgo según la experiencia adquirida.
- Herramientas específicas : Kira Systems, Luminance, Contract Intelligence (Wolters Kluwer)
- Generación de documentos estandarizados
- Herramientas específicas : HotDocs, ContractExpress, plantillas IA personalizadas
- Vigilancia normativa automatizada
- Herramientas específicas : Doctrina Vigilancia, alertas automatizadas Légifrance, RSS + IA de síntesis
Estas aplicaciones demuestran el impacto concreto en su productividad. De este modo, usted puede Dedicar más tiempo a actividades de alto valor añadido: asesoramiento estratégico, negociaciones complejas, gestión de riesgos..
Visión prospectiva: la IA al servicio de la evaluación ESG
Testimonio
Valérie Tiersen, fundadora y directora ejecutiva de Green Score Capital
«La IA está revolucionando la evaluación de riesgos ESG al hacer visibles riesgos que hasta ahora eran invisibles, gracias al análisis detallado de datos no estructurados, en particular geoespaciales. Permite pasar de un enfoque declarativo a uno predictivo, mucho más útil para la gestión de riesgos.
¿Pero cuál es la realidad del mercado? La IA ESG en las finanzas aún se encuentra en sus inicios. La mayoría de los casos de uso siguen centrados en el cumplimiento normativo, con poca integración en los procesos de gestión de riesgos. El verdadero potencial sigue estando muy infrautilizado. Lo que observo sobre el terreno es una facilitación de la redacción de informes, pero con aportaciones procedentes de datos declarativos. ¡Aún queda mucho camino por recorrer y muchas oportunidades por aprovechar!».»
Esta perspectiva ilustra perfectamente cómo la IA está transformando el análisis jurídico más allá de las aplicaciones tradicionales, creando nuevos puentes entre el derecho, las finanzas y el desarrollo sostenible.
Metodología para implementar la IA jurídica en 5 pasos
Para integrar la IA de forma segura en su práctica, siga esta metodología probada.
1.ª etapa: análisis preliminar
- Mapee sus flujos de datos sensibles (Quién : delegado de protección de datos + jurista sénior)
- Identifique las tareas automatizables de bajo riesgo (Cómo : auditoría de los procesos existentes)
- Evalúe el impacto en la protección de datos (Entregables : matriz de riesgos RGPD)
2.ª etapa: selección tecnológica
- Dé prioridad a las soluciones «Privacy by Design» (Quién : DSI + jurista)
- Compruebe el cumplimiento del RGPD por parte de los proveedores (Cómo : cuestionario de diligencia debida)
- Pruebe varias herramientas en casos no críticos (Entregables : informe de benchmarking)
3.ª etapa: configuración segura
- Configure la privacidad predeterminada (Herramientas : parámetros de seguridad avanzados)
- Minimice los datos transmitidos a los sistemas de IA (Cómo : anonimización previa)
- Configure la autenticación multifactorial (Quién : DSI)
4.ª etapa: validación y control
- Compruebe las garantías de confidencialidad (Cómo : pruebas de intrusión)
- Realice una auditoría externa si es necesario (Quién : auditor externo especializado en RGPD)
- Documente todos los parámetros de seguridad (Entregables : documentación técnica completa)
5.ª etapa: gobernanza continua
- Supervise el cumplimiento normativo (Herramientas : cuadro de mando de conformidad)
- Forme regularmente a sus equipos (Cómo : sesiones trimestrales)
- Actualice sus procedimientos según las novedades (Comunicación con los clientes : boletín jurídico mensual)
Por ejemplo:
Una empresa de tamaño medio ha implementado esta metodología para poner en marcha una solución de análisis contractual. Resultado: ningún incidente de confidencialidad en más de un año de uso y un ahorro de tiempo significativo en el análisis de los contratos comerciales.
Preserve sus competencias fundamentales
Cuidado con el riesgo de «pereza intelectual». El uso acrítico de la IA puede debilitar tus habilidades analíticas.
Testimonio
Jean-Christophe Pasco, investigador posdoctoral en la Universidad de Poitiers.
«La inteligencia artificial supone una auténtica revolución en la producción y la creación de conocimientos jurídicos. Cuestiona el papel tradicional del jurista-investigador. Hasta ahora, el jurista-investigador elaboraba cuadros de análisis que permitían comparar, distinguir y adaptar los regímenes jurídicos mediante un trabajo de erudición alimentado por múltiples fuentes. Persiguiendo un ideal de justicia que consiste en «tratar los casos similares de manera idéntica», el jurista-investigador desarrolla y sistematiza análisis jurídicos, jurisprudenciales o doctrinales sofisticados para ofrecer al público conclusiones que enriquecen la doctrina.
Hoy en día, la IA puede intervenir en cada etapa: recopilación y tratamiento de fuentes legales, jurisprudenciales y doctrinales, síntesis temáticas, análisis y comparación de textos; y la IA generativa destaca en la generación de contenidos textuales.
Sin embargo, los requisitos de los ámbitos jurídico y científico siguen siendo los mismos: seguridad jurídica, rigor analítico y científico, respeto de la deontología y protección de la confidencialidad. También se trata de ámbitos en los que las decisiones y las hipótesis de investigación pertenecen exclusivamente a sus autores (aceptación o rechazo de teorías anteriores, construcción y selección de argumentos pertinentes y convincentes).
Por lo tanto, estas condiciones limitan, sin poner en tela de juicio los beneficios de la IA en la producción de conocimiento, la posibilidad misma de un uso sistemático y exclusivo de las producciones generadas por la IA.»
Sin embargo, el informe del Senado reconoce que es más probable que se reduzcan las necesidades de personal para las tareas de asistencia. Por lo tanto, será necesario mejorar las competencias de estos profesionales, pidiéndoles, en particular, que controlen los resultados obtenidos mediante el uso de la IA generativa.
[Solución] La formación continua
Es imprescindible continuar y acelerar la adaptación de la formación jurídica inicial y continua a los retos y al uso de la inteligencia artificial generativa. Los organismos de formación como ORSYS integran en sus programas de formación profesional:
- las competencias digitales jurídicas
- La ética de la IA aplicada al derecho
- las guías de buenas prácticas sectoriales
¿Desea integrar decididamente la inteligencia artificial en su práctica jurídica diaria? Venga a adquirir los conocimientos necesarios para comprender el funcionamiento de la IA generativa y dominar las herramientas adaptadas a sus necesidades específicas. Pruebe también la creación de documentos jurídicos con Copilot y otras herramientas de automatización. ¿Desea saber más? Consulte el programa de la formación. La inteligencia artificial (IA) al servicio de las profesiones jurídicas y legales.
La protección de sus datos: ¿la IA jurídica, ¿una falla o un escudo?
Actualidad normativa
Las novedades normativas del verano de 2025 marcaron un punto de inflexión decisivo.
Plazos IA Act
- 10 de julio de 2025 : publicación del código de buenas prácticas de IA para uso general (GPAI)
- 2 de agosto de 2025 : entrada en vigor de los nuevos requisitos de transparencia, auditoría y calidad para los modelos GPAI.
- Impacto directo en las herramientas que utilizas a diario (ChatGPT, Claude, etc.).
Evolución normativa
- 12 de septiembre de 2025 : entrada en vigor de la Ley de Datos, que establece el derecho de acceso a los datos de los objetos conectados.
- 12 de enero de 2027 : nuevas obligaciones para los fabricantes para garantizar la portabilidad de los datos
Estos avances crean un marco más estricto, pero también más predecible, para el uso profesional de la IA jurídica.
Controlar los riesgos de confidencialidad
Sus datos jurídicos son especialmente sensibles: información personal, secretos comerciales, estrategias litigiosas. Por lo tanto, el uso de la IA plantea cuestiones cruciales en materia de protección.
Los principales riesgos que debe gestionar:
- almacenamiento de datos confidenciales por parte de los modelos de IA
- Fuga de información en los sistemas en la nube.
- incumplimiento de las obligaciones del secreto profesional
Testimonio
Tiffany Dumas
«Las tres precauciones esenciales del RGPD antes de utilizar una herramienta de IA jurídica son: comprobar que la herramienta no almacena los datos introducidos, asegurarse de que los servidores se encuentran en la UE y anonimizar siempre los documentos antes de analizarlos. Desde la entrada en vigor de la Ley de IA, mi percepción ha cambiado: por fin contamos con un marco jurídico claro, lo que garantiza la seguridad de nuestras recomendaciones a los clientes».»
Un marco normativo cada vez más definido
En primer lugar, debe respetar el marco jurídico ya establecido:
- RGPD
- el Reglamento europeo sobre IA (Ley de IA), en vigor desde agosto de 2024.
El informe del Senado también recomienda la elaboración de normas profesionales específicas. Un enfoque complementario podría incluir «leyes blandas».
Este enfoque le ofrecería:
- flexibilidad ante los avances tecnológicos
- consenso profesional sobre las mejores prácticas
- responsabilización actores
- orientación práctica sobre cuestiones éticas
La IA como herramienta de protección
Paradójicamente, la IA también puede reforzar la protección de sus datos. De hecho, algunas aplicaciones permiten:
- detectar automáticamente la información confidencial de sus documentos (soluciones como Microsoft Purview, Varonis)
- anonimizar las decisiones judiciales (herramientas especializadas como Doctrine Anonymisation)
- automatizar sus procesos de cumplimiento del RGPD (plataformas como OneTrust, TrustArc)
Por ejemplo:
Un departamento jurídico utiliza una herramienta de IA para escanear automáticamente sus contratos e identificar las cláusulas relativas a los datos personales que deben actualizarse tras la entrada en vigor del RGPD. Resultado: se procesan grandes volúmenes de contratos en pocos días, en lugar de varias semanas si se hiciera manualmente.
Biblioteca de plantillas legales listas para usar
Aquí tienes algunos ejemplos concretos que puedes utilizar inmediatamente en tu práctica.
Para el análisis contractual:
«Analiza los riesgos jurídicos de este contrato centrándote en las cláusulas de responsabilidad, las condiciones de rescisión y los aspectos relacionados con el RGPD. Identifica los puntos que requieren negociación y propone alternativas».»
Para el cumplimiento del RGPD:
«Redacta una cláusula de confidencialidad que cumpla con el RGPD para un contrato de prestación de servicios que incluya el tratamiento de datos personales. Incorpora los principios de minimización de datos y duración de la conservación».»
Para el seguimiento jurídico:
«Sintetiza los recientes cambios normativos sobre la IA en el sector financiero europeo, identificando las repercusiones concretas para las entidades de crédito y las obligaciones de cumplimiento normativo».»
Para la redacción de documentos:
«Genera una cláusula de fuerza mayor adaptada al contexto poscovid, que integra los riesgos sanitarios y las obligaciones de mitigación para las partes contratantes».»
Estas indicaciones constituyen una base de trabajo que debe adaptarse a su contexto específico y validarse siempre jurídicamente.
En definitiva, la inteligencia artificial transforma su práctica del derecho al ofrecer oportunidades de eficiencia considerables. Sin embargo, para sacarle el máximo partido, debe adoptar un enfoque equilibrado. En primer lugar, posicionando la IA como una herramienta complementaria a su experiencia. Pero también manteniendo una supervisión crítica de las recomendaciones algorítmicas. También debe desarrollar una doble competencia jurídica y tecnológica. Por último, se trata de implementar protocolos rigurosos de protección de datos. La formación desempeña un papel crucial en esta transición. Le permite adquirir las competencias necesarias para utilizar eficazmente estas tecnologías, al tiempo que preserva su juicio crítico. El futuro pertenece a los profesionales del derecho que sepan dominar estas herramientas, preservando al mismo tiempo la esencia de su profesión: el asesoramiento, el análisis crítico y el acompañamiento humano.





